jueves, septiembre 13, 2007

M.A.R.A.V.I.L.L.A.

Hace dos días había planeado poner un post un tanto cínico, después me vino la idea de poner algo más amargo y hasta hace un momento pensé que me ahogaría con todo eso y no puedo dejar que eso pase. Ayer platicaba yo con una amiga: cosas buenas ocurren, para nada que todo el tiempo, pero sí cuando uno lo necesita, aunque aveces uno no se entere de esa necesidad. Estaba viendo unas fotos, de alguien que ni conozco, y había una foto en un desierto. La foto tenía una nota sobre ese momento y me pareció muy bonito todo lo que decía la foto. Allá, muy lejos, muy lejos, existen personas hermosas que todavía sueñan; que el desierto les recuerda algo.

Viendo todas estas rachas de pájaros de colores que se posan en ventanas tan diversas y lejanas

unas de otras (si, como tú, como yo, como quien sabe quienes más) me quedé con un gusto

dulzón, tanto como el té que me estoy tomando.

Es un té frío y la tarde es fresca.

No ha salido el sol en días por aquí, por mi casa, no sé en donde sí ha salido el sol y no me interesa.

Aquí no ha salido.

Pero tengo un gato que duerme junto a mis pies.

Hay niebla tratando de atrapar con sus dedos de jazmín, los talones de los gatos nocturnos.

Yo puedo mirar al frente.

Yo puedo mirarte de frente.

Yo no tengo nada que ocultar ni de que arrepentirme.

Y cuando te acerques no voy a dejar de mirarte,
a los ojos,
de frente.

Vas a besarme con el filo de tus labios,
y yo no dejaré de llamarte maravilla.

Maravilla que ocultas el brillos de ese verde imposible
y lo transformas en dos pájaros hablando,
en una lengua maravilla.

Maravilla, maravilla de mentir el paraíso
porque es una palabra imposible,
y no me queda nada entre sus letras.

No conoces la luz, ni la cuchara con que comía tu viejo reflejo,
no conoces aquel cuento,
donde yo era una paloma
que te lloraba en sueños, maravilla.

Maravilla, que brillas un momento
y luego te vas cantando
una canción que cantaban Santos,
maravilla, te vas cantando.

No puedes huir,
eres maravilla solo entre mis manos.

3 dichos:

carlos dijo...

Quizá no tan allá tan lejos =) (Esa onda de miracle, hope)

Está bonito el texto =D

Indio Cacama dijo...

Debes amar el barro que está en tus manos
debes amar tu arena hasta la locura,
y si no, no la emprendas
que será en vano:
sólo el amor engendra la maravilla...

ejem, perdón , ah sí, cambien el disco de S.R.

Mariana Orantes dijo...

Carlos: Sí, quizá no tan allá... eso es lo que espero.

Y que bueno que te gustó.

Ernesto: existen maravillas.

 

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