Días de octubre amoroso

Tengo muchas cosas que contar y no sé ni por donde empezar, así que lo mejor será ir de manera cronológica en los sucesos:

1.- Las lecturas en el metro

Es toda una experiencia leer en un lugar con tanta gente. Las lecturas se hicieron en la estación Pino Suárez, en el cruce de la línea rosa con la azul. Ahí encuentras vendedores ambulantes, franquicias de pizza y tiendas naturistas. El recital empezó a las 4pm hora pico en la que todo el mundo pasa por ahí. Van viejitos, oficinistas, señoras con el mandado, niños, estudiantes. El primer día que leí, moría de nervios. Demasiada gente, demasiados oídos y ojos serenos. A veces los que iban pasando, se detenían. Otras, al contrario, se iban. Conmigo fueron buenos, mucha gente se detuvo. Con todo el ruido que hay, al leer sientes que no te escuchas, a pesar de tener un micrófono. Eso hace que levantes la voz, que intentes leer mejor, con más emoción. He leído en otros lugares y nada se compara con leer en una estación del metro en hora pico. Nada. Ese primer día, leí un poema que se llama "El pilar que sostiene al mundo", el cual dediqué a los presentes: a las doñitas, a los señores, a los niños. Cuando terminé de leer un viejito que se quedó a escuchar a los poetas, empezó a gritar: ¡Viva la poesía! pero vivan más los que la hacen, porque ellos son El pilar que sostiene al mundo!... inspirador, debo decirlo. Pueden darte un reconocimiento por lo que quieras y puedes cargar un papel por todos lados, pero nada se compara a la sensación de que a alguien le guste lo que escribes, que lo muevas a gritar. Fue maravilloso. Aquí pueden leer otra reseña de ese día.

2.- Presencia del Ateneo Español de México

En el Ateneo hubo muchos eventos este mes, los cuales ayudé a coordinar y todos salieron bien. Los eventos fueron: el primer seminario de investigaciones realizadas en la biblioteca del Ateneo Español de México, presentación del libro Nuevas Raíces, homenaje a la escritora Águeda Pía y la presentación del documental y la exposición Mujeres republicanas. Eso en la sede del Ateneo. En los eventos de la feria internacional del libro del Zócalo de la Ciudad de México, se realizaron mesas redondas y lecturas poéticas ya que el tema de la feria fue el homenaje a Federico García Lorca y a la segunda república española. Los temas de las mesas del Ateneo fueron: México ¿país de refugio? donde se habló del exilio español del 39 en contraste con la situación actual de los migrantes; La República, siempre la República, en esta mesa se habló de la avanzada enorme en materia de educación y laicismo que traía la República y que fue cortada por el régimen franquista, pero que muchos de sus preceptos se pueden aplicar hoy en día al México actual como enseñanza que dejaron los refugiados. Al final de esta mesa, Fernando Serrano Migallón dijo ¡Viva la República! y vale, fue muy emotivo. También se hizo la presentación de la biblioteca y los catálogos de Félix Candela. Además hubo una mesa de lectura poética en la que participaron Antonio Deltoro, Francisco Segovia y Xhevdet Bajraj, esa mesa fue moderada por mi. Y bueno, hubo muchísimo trabajo, pero ya pasó.

3.- La premiación del concurso de cuentos del CONAFE

Como ya saben, Raúl y yo ganamos un lugar en el concurso de cuentos infantil y juvenil, cuenta conmigo del CONAFE. Raúl ganó el primer lugar de la categoría juvenil y yo gané el quinto lugar de la categoría infantil. La premiación fue en el museo de antropología e historia. Para mi, eso fue increíble porque, cuando yo era niña, en la primaria nos llevaban a ese museo. Ahí, en la explanada donde se encuentra el Tláloc, justo en la entrada a las primeras salas, se realizó el evento. Cuando yo era niña me impactaba ese lugar y jamás hubiera imaginado que en ese lugar recibiría un premio. También entregaron el premio CONAFE a los instructores comunitarios y se hizo la ceremonia de cancelación del timbre postal. Todo esto para conmemorar los 40 años de esta institución. Nos dieron el cheque, los diplomas, un paquete de libros, un paquete de láminas hermosas y un centenario de plata conmemorativo de los 40 años del CONAFE. Después, fuimos a comer sushi y a tomar como cosacos. Pronto van a publicar los cuentos. en la foto estamos los ganadores del concurso de cuentos.

4.- Querétaro, la revancha

Para celebrar la premiación, decidimos regresar a Querétaro. Más que nada porque teníamos cosas pendientes. La vez pasada no fuimos con mucho dinero y no pudimos pasearnos porque el congreso nos exigía estar en cada cantina donde se realizara una fiesta. Paseamos en el tranvía, comimos cortes deliciosos y gorditas de migajas; fuimos a todas las plazas, compramos dulces, rompope, licor de manzana, alfeñiques, salsa mosca. Paseamos por el cerro de las campanas, vimos el acueducto y el panteón de los queretanos ilustres. Comimos menudo, fuimos a la feria del libro y en general nos la pasamos muy bien. Compré un dije de gota de cristal y ya tengo mi máquina de escribir. Es una remington negra, bellísima. En ella tengo proyectado escribir un tiempo.


5.- El nuevo orden

Con el dinero del premio compramos nuevas máquinas para trabajar, dos laptop con pantalla de 15.6 pulgadas, hermosas. También compramos una pantalla grandota grandota para ver películas y ya estamos en trámites con el nuevo departamento. Muchos libros nuevos y nos faltan cosas más prácticas, algo así como refrigerador y mariconadas por el estilo. La verdad es que ya no puedo esperar para mudarme. Creo que de momento es todo sobre lo que hablaré hoy. Tengo muchas ideas en la cabeza, pero las dejaré para otro día. Con paciencia se gana el cielo.