viernes, diciembre 09, 2011

yo tengo un mejor amigo perdido








1.- Hace unos días me encontré con un amigo de hace mil años. Fácil, hace como 5 años que no lo veía. El caso es que estuvimos hablando un buen rato y después me contó que él seguía en contacto con Daniel. Daniel es mi mejor amigo de la secundaria y preparatoria. Todavía hace unos años salía con él. Conocí a su hoy esposa y me quedé en que ella estaba embarazada. Después, por mis problemas personales, le perdí la pista. Además, pues él tenía cosas que hacer, muchas cosas que hacer. Este amigo que re-encontré (Rodrigo), me enseñó una foto de Dani con su hija, preciosa, que tendrá como unos cuatro años. Me encantaría conocerla, me gustaría volver a platicar con él. Recuerdo que él se quedó un día en mi casa, nos quedamos en el suelo, en el cuarto de mi hermana, con ella. Platicamos en la noche, y nos daba tanto gusto ser amigos, simples amigos, sin complicaciones, sin tonterías. Era como ser niños. Nos prestábamos libros, salíamos a conciertos, él me cuidaba mucho, él me consolaba cuando algún imbécil me rompía el corazón. Una vez en su cumpleaños le hice una moja, porque deben saber que él tenía una cabello largo y rizado hermosísimo. Y la verdad es que lo extraño mucho. No sé si tiene correo electrónico, no sé donde encontrarlo. Sé que puedo ir a su casa, pero no me atrevo. Tal vez un día de estos. Recuerdo que cuando lo conocí en la secundaria, él me gustaba. Pero yo era la persona más insegura y tímida del mundo, así que opté por ser su amiga. Con el tiempo lo valoré más como un amigo y dejé de verlo como un galán. Me presentó a sus novias, le presenté a los míos. Cada quien se fue a una preparatoria diferente, él me visitaba en la mía, y nos íbamos de parranda. Una vez fuimos a desayunar a revolución, sin un peso. En verdad lo extraño ahora que lo pienso. Tengo pocos amigos, pero los que tengo son valiosísimas personas. Me gustaría un día hacer una fiesta o una reunión y verlos a todos muy contentos. Algo así como el final de "Big fish" donde todos mis amigos estén, antes de que yo parta, antes de morir, antes de irme. Tal vez nunca suceda, pero ese sería mi mejor final.


Por cierto


¿Saben porqué mi papá es mi héroe? porque es simplemente lo mejor de lo mejor.

"Todo en la vida tiene una razón de ser; Las personas que hacen cualquier cosa por dinero, reciben cualquier cosa de dinero. Las personas, que como tú, se esfuerzan por ser creativas y dejar huella en la memoria de la humanidad, pues recibiran los laureles y honores de la propia humanidad. No te confundas, hija, deja a los rastreros que hagan su tarea, allá en sus agujeros, que arrastren su miseria, su mediocridad, tú estás muy por encima, tú estás en lo alto, tú estás con los elegidos... y nunca, su veneno te alcanzará"

"Para mi forma de ser, de pensar y de vivir, tener un hijo es una responsabilidad muy grande, a quién hay que procurarle toda clase de cuidados y ofrecerle todo el cariño del mundo, sin detenerse a pensar si será bueno o será malo, eso es circunstancial; y todo por una razón muy simple, que algún día, cuando sean padres la comprenderán"

P.S. gracias, papá.


2.- William Butler Yeats, Teatro completo, poesía y ensayo. Ed. Aguilar
La bella durmiente, Ed. Renacimiento. Ilustraciones de Adrienne Segur
Cuentos de Andersen, Ed. Renacimiento. Ilustraciones de Adrienne Segur y Davanzo
Carlos Pellicer, Material poético. UNAM 1962

3.- El otro día escribí diez cuartillas de teatro. No quedó muy bien, es lo primero que escribo en teatro en toda mi vida, pero estoy feliz. Completé una obra de teatro, con diálogos y un monólogo, al final hay un epílogo y tiene sentido. ¿Sabes lo que es eso? Tiene sentido. Es decir, hay una historia, hay una personaje principal, hay conflicto. Y tal vez no sea La gran obra de Teatro, pero estoy feliz de haberla hecho. La escribí, tiene orden y sentido. Está hecho y puedo hacer más. Me gustaría corregirla con tiempo o dejarla de lado, no importa, es sólo que le perdí el miedo a escribir teatro y eso me pone feliz. No sé si comprendes mi felicidad ante esto. Verás, cuando escribo algo y siento que es bueno, que va hacia algo, que tiene sentido o que logra algo, siento un golpe de sangre en la cabeza. Me emociono tanto que me pongo nerviosa, me tiemblan las manos, el corazón se acelera y al final, me mareo. Me sucede lo mismo cuando leo un poema, un cuento o llego a alguna parte específica de una novela que me impacta. Tal vez pienses que debe ser molesto o desagradable, pero no es cierto, es maravilloso. Es una relación emotiva, y aunque no comprendo cómo funciona, me gusta. Me gustaría contar más cosas, pero ya habrá tiempo, siempre hay tiempo.
 

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