Epílogo
En los campos de la muerte
En qué
instante el hombre perdió su lugar en el cementerio
Y la
muerte se vació de símbolos
(Incompletos
porque ninguno describe a detalle la desesperanza
Mantel
del horizonte que todo lo cubre)
Lejos
en otros lugares ocurrían las muertes
Después
se precisaron las fechas
Por
más rezos tendidos como ropa húmeda
Hombres
y mujeres no regresaron
No se
amaron ni tuvieron hijos
En qué
profundo latido
En qué
último golpe de sangre
Quedó
la mano abierta para el pan eterno
Extensión
de aquellos lugares
Exactos
o inexactos
Bajo
un árbol los hombres perderán cada marca reconocible
Serán
carne bajo piedra
Pasto
vivo
En un
lugar con el nombre de todas las ciudades
Y
serán la cabeza que vendrá para atormentarnos
En la
paz de los puentes peatonales
Transformados
en hierba
Llegarán
como carmesí en invierno
Flor
recién nacida para las mujeres que bailan
Sobre
los últimos campos de la muerte.
Mariana O.
2 dichos:
Este pinche poema me estremece... toda, toda...
Esa es la intención, estremecerte toda toda, mujer. Un beso
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